Carcinomas queratinocíticos: ¿debemos hacer detección?
Michael P. Pignone, MD, MPH, MACP, y Adewole S. Adamson, MD,
MPP University of Texas at Austin, Austin, Texas
El carcinoma queratinocítico, el cual incluye los carcinomas cutáneos basocelular y espinocelular, es frecuente y la incidencia está aumentando. Según los Centers for Medicare y Medicaid Services, se calcula que el número de carcinomas de queratinocitos diagnosticados en Estados Unidos en 2012 fue mayor de 5.4 millones.1 Los costos de estos tratamientos son altos. Desde 2007 a 2011, el costo promedio anual para el tratamiento del cáncer de piel en Estados Unidos fue de $8.1 mil millones de dólares2 El artículo de Firnhaber en este número de la revista analiza las opciones de tratamiento disponibles, lo que permite que el tratamiento sea individualizado con el fin de minimizar las consecuencias funcionales y cosméticas de estos cánceres al mismo tiempo que maximizan las tasas de curación.3 Una pequeña proporción de los carcinomas espinocelulares cutáneos tiene el potencial de dar metástasis; sin embargo, el carcinoma queratinocítico tiene un muy bajo riesgo de muerte con una incidencia de 7,000 por cada 100,000 aunque la tasa de mortalidad es sólo de 0.44 por cada 100,000.1,4,5
