Nefropatía crónica en diabetes: directrices de la KDIGO
Puntos clave para la práctica
Se recomiendan los programas estructurados de educación sobre el automanejo de la diabetes debido a que mejoran la autoeficacia y los criterios de valoración clínicos.
El tratamiento antiglucémico de primera línea para la diabetes tipo 2 y CKD con un eGFR bajo de 30 mL/minuto/1.73 m2 debe incluir metformina y un inhibidor de SGLT2 para mejorar los resultados cardiovasculares y limitar la progresión de la CKD
Debe maximizarse el tratamiento con un inhibidor de la ACE o un ARB, en pacientes que tienen diabetes con albuminuria e hipertensión, a menos que esté complicado con hipotensión sintomática, hiperpotasiemia no controlada o un aumento mayor de 30% en la concentración de creatinina.
De los editores de AFP
La diabetes mellitus afecta a más de 450 millones de personas en el mundo entero, lo cual podría aumentar a más de 700 millones de personas para el año 2045. Incluso 40% de los casos de diabetes está complicado con nefropatía crónica (CKD, chronic kidney disease), con anomalías persistentes de la función renal demostradas por la elevación de excreción de albúmina en orina o la reducción de la velocidad de filtración glomerular calculada (eGFR, estimated glomerular filtration rate). El grupo Kidney Disease:Improving Global Outcomes (KDIGO), una organización internacional dedicada a las directrices de la práctica clínica de nefrología desarrolló una nueva directriz para el tratamiento de la diabetes con CKD.
La cobertura de las directrices de otras organizaciones no implica respaldo de AFP ni de la