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JULIO 2023 ­

Tratamiento farmacológico de la depresión

Heather Kovich, MD, Shiprock-University of New Mexico Family Medicine Residency Program and Northern Navajo Medical Center, Shiprock, New Mexico
William Kim, MS, MD, Shiprock-University of New Mexico Family Medicine Residency Program, Shiprock, New Mexico
Anthony M. Quaste, PharmD, USPHS, Northern Navajo Medical Center, Shiprock, New Mexico

La prevalencia de la depresión y el uso de medicamentos antidepresivos se ha elevado en forma constante en Estados Unidos, a lo largo de las últimas tres décadas. Los antidepresivos son los medicamentos que se prescriben con mayor frecuencia para los adultos estadounidenses de 20 a 59 años de edad. Los antidepresivos de segunda generación (p. ej., inhibidores selectivos de la recaptura de serotonina, los inhibidores de la recaptura de serotonina-norepinefrina, moduladores de la serotonina, antidepresivos atípicos) son la terapia de primera línea para la depresión. La psicoterapia, que incluye la terapia cognitivo-conductual y otros tipos de tratamiento individual o grupal, es también un tratamiento de primera línea. Se prefiere la combinación de medicamento y psicoterapia para la depresión grave. Cuando se elige un antidepresivo, deben tomarse en cuenta el historial de tratamiento, enfermedades concomitantes, costos y riesgo de efectos adversos. Aunque muchos pacientes utilizan antidepresivos de manera indefinida, en pocos estudios se ha estudiado la seguridad y efectividad más allá de dos años. Existe un aumento de riesgo de recaída o recurrencia de los síntomas depresivos cuando se suspende un antidepresivo. La disminución gradual de la dosis al mismo tiempo que se proporciona terapia cognitiva conductual, disminuye este riesgo. Falta evidencia de calidad relacionada con el uso de antidepresivos durante el embarazo. La depresión y el uso de antidepresivos se relacionan con nacimientos prematuros. (Am Fam Physician. 2023; 107(2): 173-181. Copyright © 2023 American Academy of Family Physicians.)

El uso de medicamentos antidepresivos en Estados Unidos ha aumentado cinco veces desde la introducción de los inhibidores selectivos de la recaptura de serotonina (SSRI, selective serotonin reuptake inhibitors) a finales de la década de 1980.1,2 Entre 2015 y 2018, el porcentaje de adultos estadounidenses que refirió tomar un antidepresivo en los últimos 30 días fue de 13.2%, en comparación con 2.4% entre 1988 y 1994.1,2

Los antidepresivos son los medicamentos que se prescriben con mayor frecuencia para los adultos estadounidenses de 20 a 59 años de edad.3 Las tasas de depresión y suicidio han aumentado, sobre todo entre los menores de 25 años.4,5 El porcentaje de adultos de 18 a 25 años que refiere un episodio depresivo mayor en el último año, se duplicó en el último año de 8.8% en 2005 hasta 17% en el 2020. Durante el mismo periodo, las tasas en los adultos de 26 años y mayores aumentaron sólo un poco de 6.2 a 7.1%.6,7

 

Este contenido clínico se ajusta a los criterios de la AAFP para educación médica continua (CME, continuing medical education).
Revelación del autor: sin afiliaciones financieras relevantes

La definición de episodio depresivo mayor se basa en los criterios de trastorno depresivo mayor del Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders, 5th ed.6,8 Debe haber cinco o más síntomas depresivos, durante por lo menos dos semanas, deben causar angustia o deterioro funcional y no deben estar relacionados con otro padecimiento médico o psiquiátrico. Los síntomas incluyen estado de ánimo deprimido, anhedonia, cambios en el peso corporal o en los patrones de sueño, fatiga, agitación o retraso psicomotores, sensación de minusvalía o culpa, deterioro de la concentración y pensamiento de muerte recurrentes.6,8 En los estudios clínicos de antidepresivos suele utilizarse a menudo un episodio depresivo mayor como criterio de inclusión. Aunque la mayoría de los pacientes con depresión identificada por un médico no cumple con los criterios diagnósticos para episodio depresivo mayor, a muchos se les prescriben antidepresivos.9

Los antidepresivos de segunda generación son los medicamentos de uso más frecuente para tratar la depresión en Estados Unidos.10 Estos incluyen los SSRI (p. ej., escitalopram, paroxetina), los inhibidores de la recaptura de serotonina norepinefrina (SNRI; serotonin-norepinephrine reuptake inhibitors ; p. ej., duloxetina, venlafaxina), los moduladores de la serotonina (p. ej., nefazodona, trazodona) y los antidepresivos atípicos (p. ej., bupropión, mirtazapina).

 

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Tratamiento farmacológico de la depresión

Entre 2015 y 2018, el porcentaje de adultos estadounidenses que refirió haber tomado un antidepresivo en los últimos 30 días fue de 13.2%, en comparación con 2.4% entre 1988 y 1994.

Evidencia modesta muestra que escitalopram, mirtazapina, paroxetina, venlafaxina y amitriptilina son los antidepresivos más efectivos para reducir, más de 50%, los síntomas depresivos agudos, a las ocho semanas.
En un metaanálisis en red de 2021 se demostró un riesgo bajo de arritmia ventricular o muerte cardiaca súbita en quienes tomaban inhibidores selectivos de la recaptura de serotonina, inhibidores de la recaptura de serotonina-norepinefrina o antidepresivos tricíclicos.
Los síntomas típicos del síndrome de suspensión de antidepresivos se describen utilizando la nemotecnia FINISH por sus siglas en inglés (síntomas semejantes a influenza, insomnio, náuseas, inestabilidad, trastornos sensitivos, hiperexcitación).

Efectividad

A pesar de miles de estudios clínicos, no está bien establecida la efectividad de los antidepresivos. Las revisiones de alta calidad, de estudios comparativos con asignación aleatoria muestran una mejoría estadísticamente significativa en la depresión con el uso de medicamentos antidepresivos.11,12 En una revisión sistemática del 2016, se mostró que el número necesario para tratar para respuesta a tratamiento o remisión es de nueve para los antidepresivos tricíclicos, siete para los SSRI y seis para venlafaxina.11 Los resultados de otros estudios refutan estas conclusiones, con una diferencia mínima en los síntomas entre el placebo y los antidepresivos, sesgo de publicación que favorece la efectividad y el patrocinio de la industria farmacéutica de la mayoría de los estudios clínicos.11,13,14 En una encuesta nacional de adultos con depresión se reveló que quienes utilizaban antidepresivos no tuvieron una mejoría en la calidad de vida relacionada con la salud a los dos

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